Que la que es nuestra corona,
María Santísima de la Esperanza
nos bendiga y nos proteja,
nos cubra bajo su amoroso manto
y nos haga alcanzar,
por su intercesión,
la corona de gloria que no se marchita
y que Dios tiene preparada en el cielo
para todos los que cumplan su voluntad.
Madre y Señora nuestra de la Esperanza,
Tú eres nuestra corona.
Madre y Señora nuestra de la Esperanza,
queremos ser tu corona.
Madre y Señora nuestra de la Esperanza,
ruega por los que viven sin esperanza.
Madre y Señora nuestra de la Esperanza,
ruega por nosotros.
Oración: Rvdo. P. José Gabriel Martín Rodríguez.
Foto: Sergio Aguayo.